Durante el mundial hubo un tipo que ralentizó el juego, que tocó siempre para los costados, para atrás. Un tipo al que hubo que armarle un equipo alrededor, que hubo que darle todos y cada uno de los balones, que no rindió. Pero mi intención no es hablar de Manú Ginobili, sino de Riquelme, que renunció a la selección.

Levantando la Copa en Alemania

Riquelme es un tipo polémico, aunque no se entiende muy bien por qué. Comprendo que Menem sea polémico, que Mouriño sea polémico, que Beckham sea polémico, ¿Pero Riquelme? Si ni siquiera habla. Y no me vengan con que «No es lo que dice, es lo que NO dice». Porque tampoco parece que «no diga» tanto, más bien parece un tipo que, como tantos, no tiene nada que decir.

Riquelme es un jugador conocido, importante, pero no es un crack, una súper figura, NO ES Dinho, Deco, Ballack, Eto’o, Zidane, Ronaldo pero, y acá viene lo más triste, tal vez sea el mejor jugador que tengamos o uno de los mejores.

Riquelme nos jode, odiamos a Riquelme, porque marca el nivel que tiene el fútbol Argentino, que es bueno, pero no tanto como nos gustaría, que es mediocre con respecto a nuestra historia, que da para ser octavos, novenos, pero nunca segundos o primeros.

Lo más probable es que Aguero, Tevez, Aimar, Palacio y hasta Messi sean nuevos «Riquelmes».

Con otras características pero nuevos «Riquelmes». Tipos buenos, pero no tanto, mediocres dentro de un nivel competitivo.

Curuchet, Meolans, Pichot, Milanesio, Gaudio, «Pechito» López fueron, son y seran «Riquelmes».

Los que critican a Riquelme: Olé, La Nación, El «Chavo» Fucks, J.P. Varsky, Martin Souto,  Niembro, Vilouta  son «Riquelmes».

Yo soy «Riquelme».

Vos sos «Riquelme».

Todos somos «Riquelme». *

Y «Los Riquelme» odiamos a Riquelme porque él podría dejar de ser «Riquelme». «Si corriera un poquito más», «Si metiera la patita», «Si en vez de quedarse en la puerta de su casa tomando mate y bizcochitos de grasa con su muscolosa blanca se comprara un traje Armani, una Ferrari y saliera con una súper modelo».

Tomando mate en la vereda con la Flia

«Nosotros no tenemos elección, estamos condenados pero ¿Por qué él es «Riquelme» pudiendo no ser «Riquelme»?» Fácil, porque es Riquelme.

Gracias Riquelme por ser «Riquelme», aunque a veces te putee por ser Riquelme.

Saludos.

El Beduino, Otro «Riquelme».

Pd: Déjennos vivir nuestra mediocridad en paz.

 

* Perdón pero siempre quise decir algo así.